miércoles, 27 de febrero de 2008

Guerra a los anglicismos

Hoy se publicó esta noticia acerca de la guerra a los anglicismos que ha declarado Hugo Chávez en su país. Obviamente, más allá de la defensa al español, la intención del presidente venezolano es la de molestar a los gringos, pero de todas maneras me parece bien que se voltee a ver la riqueza que tiene nuestro idioma.

lunes, 25 de febrero de 2008

De elecciones y reelecciones

Encuentro esto en el diario: 'Ricardo Alarcón fue reelecto presidente de la Asamblea'. Resulta de desde hace mucho tiempo se ha decidido erradicar de una vez por todas y para siempre los participios de los verbos elegir y reelegir: elegido y reelegido, y se los ha reemplazado por los adjetivos electo y reelecto. Probablemente por el vicio de optar por las formas más rebuscadas en pos de una falsa erudicción.

Tradicionalmente, y consta así en el DRAE, electo ha sido considerado un participio irregular de elegir, cierto. Sin embargo, la única función de este participio es la de adjetivo, que ,como ya sabemos, modifica al nombre. Podemos hablar, entonces, del presidente electo o de las asambleístas reelectas; pero no podemos usar electo o reelecto para las formas compuestas de elegir o de reelegir.

El participio regular de reelegir y elegir es, naturalmente, elegido. Este es el que debe acompañar a las formas compuestas y a las perífrasis de los verbos. Por lo tanto, la forma adecuada de escribir la frase del inicio es: 'Ricardo Alarcón fue elegido presidente de la Asamblea', pues estamos utilizando el participio para una perífrasis, no como un adjetivo. Podemos hablar, sí, de Ricardo Alarcón, presidente reelecto de la Asamblea, ya que aquí reelecto está complementando al sustantivo presidente, le está dando una cualidad.

Eso es todo.

jueves, 21 de febrero de 2008

Incluso en estos tiempos...

Sucede que confundimos incluso con inclusive, todavía. Son innumerables las veces en las que encuentro un inclusive impertinente que está ocupando el puesto que debería ocupar su pariente incluso.

Resulta que estos dos son muy parecidos, pero tienen grandes matices que los diferencian, así como a los primos. Empecemos por los significados. Copio lo que nos dice el DRAE.

inclusive.
(Del lat. escolástico inclusīve, y este del lat. inclūsus, incluso).
1. adv. m. Incluyendo el último objeto nombrado.

incluso, sa.
(Del lat. inclūsus).
1. adj. Contenido dentro de una cosa, o que está implícito en ella.
2. adv. m. Con inclusión, inclusivamente.
3. prep. Hasta, aun. Incluso a los enemigos amó. U. t. c. conj.

Como podemos ver, inclusive solo tiene una función: es adverbio, y nos sirve solo cuando nos referimos al último objeto que hemos enumerado. Por ejemplo: 'Luisa faltará el lunes, el martes y el miércoles inclusive; el jueves se reincorporará al trabajo'. (Es decir, Luisa también faltará el miércoles). 'No quiero nada tuyo en la casa, tendrás que llevarte la cama, el velador, la cómoda, las cobijas inclusive'. (Entonces, las cobijas también forman parte del 'combo').

Incluso, en cambio, tiene varias funciones: adjetivo, adverbio y prepocisión. Pero cuando más dificultades encontramos es cuando cumple las funciones de adverbio y preposición. Suele ser pan de cada día hallar frases como 'El agua anegó varias provincias de la Costa, inclusive algunas de la Sierra' o 'Hubo muchas obsevaciones al informe, inclusive se propuso reescribirlo'. Es obvio que en estos casos en lugar de inclusive debió haberse escrito incluso (pues no estamos hablando del último elemento enumerado): 'incluso algunas de la Sierra' e 'incluso se propuso reescribirlo'.

No es muy difícil encontrar la diferencia, inclusive es una palabra reservada a un solo caso y suele ir al final de las oraciones, incluso, por el contrario, suele ocupar un lugar en la mitad de las oraciones.

sábado, 9 de febrero de 2008

R con r, cigarro...

Vuelvo... La verdad no tengo muchas excusas para tanta ausencia, pero aquí estoy otra vez.

Hoy, mientras estaba trabajando, llegó una de las periodistas a preguntarme cómo debe escribir antirrecesión. Cuando le dije que así, en una sola palabra y con doble r, abrió los ojos y dijo: "Pero parece una falta ortográfica". Plop. Me pareció graciosa y terrible la observación, pero quizá se deba a la poca costumbre que tenemos de escribir este tipo de palabras.

A ver, el asunto es simple: cuando nos encontramos con una palabra que comienza con r (en este caso recesión) y queremos anteponerle un afijo o un elemento compositivo que termina en vocal (en este caso el prefijo anti), tenemos que duplicar la r para que esta tome fuerza en la palabra, así: antirrecesión. Veamos otras palabras en las que sucede eso: ciclorruta, archirraro, cardiorrespiratorio, autorreproche, fotorresistencia, etc. Es verdad que la doble r nos suena extraña pero no lo es para nada, es correcta, muy correcta.