miércoles, 24 de noviembre de 2010

Revuelo académico en seis dramas

La verdad no había comentado nada sobre las noticias acerca de la Nueva Ortografía de la RAE, en parte por no redundar y también porque me parece absurdo armar tanto revuelo por "las nuevas normas". Pero ahora, que ya ha pasado un poco el tema, y hasta que se lo retome cuando se publique la mentada Ortografía, pongo aquí mi opinión.

En primer lugar está el drama de que "desaparecen para siempre la ch y la ll". No me parece que sea un asunto dramático, pues la ch y la ll son dígrafos y lo más lógico del mundo es que los diccionarios las ubiquen dentro de la primera letra que las conforma y no como letras aparte. De hecho, la última edición del DRAE, que es de 2001, ya las ubica así, dentro de la C y dentro de la L. El hecho de que no se las ubique como letras aparte no quiere decir que van a desaparecer, los sonidos continúan, las palabras caminan, existen... Solo se trata de un asunto práctico y ya.

Segundo drama: el de "los nuevos nombres". Ya no se dirá "i griega" sino simplemente "ye", ya no "v pequeña" sino "uve", ya no "doble v" sino "doble uve", la "b larga" será la "be". Tampoco entiendo el revuelo porque las letras siguen siendo tales aunque se intente estandarizar sus denominaciones. De pronto este intento de buscar un solo nombre para cada letra sea positivo en el momento de establecer un estándar en documentos técnicos o en registros más cultos, pero en el español que camina por la calle esto no tiene mucha importancia.

Por alguna razón en el lenguaje coloquial de varios países americanos nunca "pegó" eso de la uve y la uve doble, pero sabemos cuáles son y el hecho de que les digamos v pequeña, o corta o chiquita, y doble ve no quiere decir que no sepamos a cuáles se refieren cuando nos hablan de la uve o la uve doble. No me parece dramático el asunto, que la RAE estandarice los nombres está bien, es un buen intento pero no es palabra de Dios porque desde hace mucho tiempo sabemos y estamos conscientes de que el uso se impone a la norma, nos guste o no.

Sobre el "nuevo nombre de la i griega" me parece una buena opción llamarla solo "ye", le da una personalidad como letra y deja de ser una dependiente de la "i".

Tercer drama: la tilde en los demostrativos y en el solo. Desde hace mucho tiempo estas tildes son opcionales en los casos comunes y obligatorias cuando existe ambigüedad. Ahora yo no hay obligación, solo opción. Personalmente, yo nunca he tildado los demostrativos o el solo de solamente, pues me parece que no es necesario, cuestión de opción solamente, si uno quiere tildar que tilde, si es no que no lo haga. No creo que haya demasiado drama en esto.

Cuarto drama: tildes en monosílabos. Una regla general de la ortografía española es que los monosílabos no se tildan, son excepción de los casos de la tilde diacrítica. Lo que sucede ahora es que esto se convierte más que nunca en regla, así dejamos de tildar guion, fie, truhan, etc., que son monosílabos aunque se pronuncien como bisílabos, con hiato.

Quinto drama: nunca más la tilde en la o. La o llevaba tilde cuando estaba ubicada entre números, más que nada porque en la época de la escritura a mano la diferencia entre la o y el cero (0) era impercetible. Es decir, solo era una cuestión tipográfica, ahora ya no es así, pues diferenciar la o del 0 no es complicado.

Sexto drama; Catar y cuórum. En la Nueva Ortografía se considera que por ser la q una letra que solo representa el fonema /k/ cuando está ubicada junto a ue y ui, solo debe tener ese sonido en estos casos. En otros casos se la reemplaza por la c, como el caso de cuórum o de Catar.

Como ven, no hay drama en las decisiones de la Academia y es absurdo tanto revuelo porque, como dije antes, queramos o no el uso se impone a la norma, y al final cada una de las decisiones se irá adaptando a la lógica y a la aceptación que le imponga ese uso. Hay que considerar, sí, que la RAE es la institución que se encarga de estandarizar nuestro español, de manera que sea el mismo en todos los países que lo hablan y, sobre todo, para que alguien que se acerca a él por primera vez no halle complicaciones o incongruencias. Quizá lo que le falta a la RAE es mirar más hacia América (por ejemplo la decisión de llamarle a la doble v doble uve es imponer el uso ibérico) y darse cuenta de que el idioma camina por esta parte del mundo de la misma manera que lo hace por España.

Eso sería todo, en conclusión les invito a no hacerse drama por cuestiones tan irrelevantes sino a cuidar nuestro idioma, a quererlo, a no maltratarlo, a usarlo con cariño y a difundirlo con todas las variables que pueda tener y con toda la riqueza de la que goza.

Encuentro de correctores

La Asociación de Correctores de Textos de Perú organizará en febrero el Primer Encuentro de Correctores de Textos. Aquí copio el enlace por si quieren asistir: http://academiaperuanadelalengua.org/correctores . Habrá temas muy interesantes que nos atañen a los correctores y, sobre todo, será una buena oportunidad para compartir experiencias y conocimientos con los compañeros de tarea.