Como veíamos respecto del Diccionario de Uso del Español de
María Moliner, escribir un diccionario no es tarea fácil, pero es una de las
tareas más encomiables que existen, pues el diccionario es ese texto que guarda
la memoria y la cultura de una sociedad o de un grupo. Hace un año, la
Federación de Personas Sordas del Ecuador (Fenasec) publicó su primer
Diccionario Oficial de Lengua de Señas Ecuatoriana, con el objetivo de dar a
conocer la lengua de señas y hacer visible a la comunidad sorda, con su cultura
y sus particularidades.
El Diccionario Oficial de Lengua de Señas Ecuatoriana es una
obra impresionante, no solo por su volumen (4 000 señas definidas y anexos, en
dos tomos de casi 700 páginas cada uno), sino por el hito que constituye para
la comunidad sorda, pues han sido muy pocos los trabajos de investigación que
se han hecho en relación con la lengua de señas. Esta lengua, como todas las
lenguas naturales, tiene elementos fonológicos, morfológicos, sintácticos,
semánticos y pragmáticos. Se trata de una lengua viso-espacial y tridimensional:
en ella las manos, el rostro y las expresiones funcionan como la ‘voz’ de las
lenguas parlantes, y la vista, como los oídos.
Además, esta lengua, como todas, cuenta con variantes. Esa
es otra de las razones por las que la Fenasec emprendió la investigación y
publicación de su diccionario: la lengua de señas ecuatoriana no es igual a las
otras lenguas de señas del mundo. De hecho, la lengua de señas de cada región del
país tiene sus particularidades; por ejemplo, la seña correspondiente a ‘arroz’ es distinta en la Costa y en la
Sierra. Para salvar estas dificultades, la Fenasec, en la etapa de
investigación, reunió a miembros de asociaciones de sordos adscritas a la
Federación y formó el Comité de Lengua de Señas. En este Comité se unificaron
criterios y se determinaron las señas que debían constar en el diccionario.
Esta etapa fue también muy interesante porque permitió a las personas sordas
que conformaron el equipo pensar acerca de su lengua y buscar, además, muchas
señas para nuevas realidades, como las de la tecnología.
Sin duda alguna el Diccionario Oficial de Lengua de Señas
Ecuatoriana es un paso importantísimo para la comunidad sorda del país, pues
condensa su memoria y su cultura. Obviamente, no es suficiente conocer las
señas para dominar esta lengua, pues hace falta saber otros aspectos
lingüísticos. Sin embargo, la publicación de este documento seguramente dará
pie a que los lingüistas se interesen en ella y estudien la variante
ecuatoriana de esta lengua como cualquier otra, y surjan estudios académicos
que hagan mucho más visible a la comunidad sorda, con su lengua y su cultura.
1 comentario:
los invito a conocer este gran mundo del lenguaje de señas http://5d081hc0rlczbk2fu8qduje9kn.hop.clickbank.net/?tid=MACK..0011
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